DYLE Nº9

Los progenitores ante el ciberacoso de sus hijos e hijas
Maialen Garmendia Larrañaga
Profesora titular UPV- Departamento de Sociología y Trabajo Social. Miembro de EU Kids on line, Red Europea de Investigación desde 2006
Carmelo Gariaonandia Garnacho
Catedrático UPV y Doctor en Ciencias Políticas. Miembro de EU Kids on line, Red Europea de Investigación desde 2006
Introducción
La evaluación de los beneficios y los riesgos derivados de las actividades digitales de los menores depende de muchos factores. La investigación de la red EU Kids Online ha evidenciado que las oportunidades y los riesgos online van de la mano: cuanto más usan los menores internet, más se benefician de sus oportunidades, adquieren más competencias y se exponen a más riesgos (Livingstone, Haddon, Görzig & Ólafsson, 2011; Garitaonandia, Karrera, Jiménez & Larrañaga, 2020). A medida que las nuevas tecnologías y las nuevas formas de comunicación se vuelven cada vez más centrales en la vida diaria de los menores, se desarrollan igualmente nuevas formas de agresión social que utilizan esas herramientas digitales, entre ellas, el acoso cibernético (Casado, Garmendia & Garitaonandia, 2019).
El acoso online y offline a menudo están interconectados, y en muchos casos el acoso online es una continuación del acoso que se ha iniciado cara a cara, frecuentemente en la escuela, y aquellos que están involucrados en el acoso online a menudo también están involucrados en el acoso offline (Garmendia, Jiménez & Larrañaga, 2019).
El bullying y el ciberbullying tienen efectos físicos, psicológicos y académicos negativos. Sus efectos más comunes son depresión, baja autoestima, ansiedad, ideaciones de suicidio y problemas psicosomáticos, como dolores de cabeza y trastornos del sueño. Además, el ciberacoso afecta también al rendimiento académico: falta de concentración, ausencias escolares, aislamiento, menor rendimiento académico, no sentirse seguro y malestar en la escuela. También hay investigaciones que relacionan la victimización por acoso cibernético con conductas desadaptadas, como son los comportamientos agresivos y desviados, un mayor uso o, incluso, abuso de alcohol, drogas o tabaquismo, y comisión de delitos.
A pesar del daño que causan los ciberacosadores, en el estudio de Udris (2015) el 45% de ellos respondieron que lo hicieron “solo para divertirse”, corroborando estudios realizados previamente en los Estados Unidos y Canadá. Esto indica que algunos menores no ven sus acciones como algo más serio que un juego, aunque en algunos casos las consecuencias pueden ser muy graves. No obstante, en ese mismo estudio se evidenciaba que el 38,6% de los acosadores respondieron que lo hicieron “porque odiaban a sus víctimas”.
La facilidad con la que se amplifica la audiencia en el caso del ciberbullying, a través de las redes sociales, contribuye a que la indefensión de la víctima y su perjuicio sean mayores que en los casos de acoso tradicional. No obstante, Udris señala que la mayoría de los casos de ciberacoso involucran a compañeros de clase y las víctimas conocen las identidades de sus torturadores: “solo el 14,8% de los estudiantes dijeron que no sabían quién los había acosado cibernéticamente” (Udris, 2015; p. 67).
En nuestra investigación se realizó una encuesta a progenitores en 2019. El cuestionario se administró a una muestra representativa de 850 padres y madres de niños y niñas de entre 9 a 17 años. Para garantizar la representatividad de la muestra a nivel nacional se seleccionaron a las personas entrevistadas en las comunidades autónomas más pobladas: País Vasco (125), Andalucía (125), Cataluña (125), Valencia (125), Madrid (125), Galicia (125) y Extremadura (100). Además, la muestra se estratificó en función del hábitat: 680 entrevistas se hicieron en capitales y 170 en otros municipios. El 61% de las personas encuestadas fueron mujeres y el 39% hombres. Para maximizar la calidad de las respuestas, los padres y madres fueron encuestados cara a cara en sus hogares. En la determinación del tamaño muestra se trabajó con el nivel de confianza del 95,5% y con un margen de error +/- 3,45%.
Percepción de los progenitores de los riesgos y el daño a los que se enfrentan sus hijos e hijas y su capacidad de ayudarles
Generalmente, la percepción de los padres y de las madres acerca de los riesgos o daño a los que se exponen sus hijos e hijas online difiere bastante de la del propio menor. Uno de cada tres (33%) menores de entre 9 y 17 años afirmaba haber sido víctima de episodios de acoso offline u online a lo largo de los anteriores doce meses, y de ellos la mitad decía haberlo sufrido a través de móviles e Internet con diferentes frecuencias. En paralelo, uno de cada cinco (20%) reportaba haber ejercido algún tipo de acoso sobre sus compañeros (EU Kids Online, 2019). La percepción que tienen los padres y las madres sobre el cyberbullying al que se exponen sus hijos e hijas es bastante menor comparada con la detectada en la encuesta a menores. Es realmente llamativo que una situación de acoso que afecta aproximadamente a uno de cada tres chicos y chicas sea tan subestimada por los padres y las madres (ver tabla 1).
Tabla 1. Cyberbullying, acosado o acosador (grupos de edad hijos/hijas) (%)
Riesgo específico | Edad del menor | |
9-12 | 13-17 | |
Bullying-online (víctima) | 7 | 10 |
Acosador bullying | 3 | 3 |
Fuente: EU Kids Online 2019: P26. Hasta donde usted sabe, durante el PASADO AÑO, ¿le ocurrió a su hijo/hija algo de lo siguiente cuando navegaba por Internet? Base: Padres y madres de niños y niñas de 9-17 años.
En general, la edad de sus hijos estructura la frecuencia con la que los padres y madres consideran que se han visto implicados en situaciones arriesgadas. A más edad en los menores, con mayor frecuencia piensan sus padres y madres que se han expuesto a riesgos online. En todo caso, las familias atribuyen a los riesgos una frecuencia muy moderada y probablemente poco realista.
Tabla 2. Percepción de daño sufrido por hijos/hijas (pasado año, por grupos de edad) (%)
Daño sufrido por hijos/hijas (pasado año) | Edad del menor | |
9-12 | 13-17 | |
Sí | 5 | 51 |
Fuente: EU Kids Online 2019: P22. Hasta donde usted sabe, durante el PASADO AÑO, le pasó algo a su hijo/hija online que le haya hecho sentirse molesto/a o disgustado/a? Base: Padres y madres de niños y niñas de 9-17 años. Base: Padres y madres de niños y niñas de 9-17 años.
Llama la atención la enorme distancia en las respuestas en función de la edad de los menores: solo el 5% de los padres y madres de hijos de 9-12 años responde afirmativamente a la pregunta sobre el daño sufrido por sus hijos. Sin embargo, en la franja de 13-17 el porcentaje se eleva hasta el 51% (ver tabla 2).
La comparación entre la percepción de los padres y de las madres con la respuesta que ofrecían los chicos y chicas es tan interesante como esclarecedora: según el informe de Garmendia el 76,5% de los niños y niñas de 9-12 años y el 75% de los de 13-17 años decían haber vivido situaciones incómodas o que les habían molestado mucho o bastante (Garmendia et al., 2019). La inmensa mayoría de padres y madres considera que las experiencias desagradables vividas por sus hijos e hijas son poco frecuentes, que se producen “algunas veces”.
Independientemente de la edad de los menores y de si son niños o niñas, el 83% de los progenitores encuestados considera que está bastante o totalmente preparado para ayudar a sus hijos en situaciones de daño (tabla 3). Solo el 17% piensa que no tienen mucha capacidad para ayudarlos. No existe diferencia entre los progenitores de niñas y de niños, y la relación con la edad de los menores es mínima. Sólo uno de cada seis encuestados se percibe como poco capaz de ayudarles.
Tabla 3. Capacidad de ayuda a su hijo o hija ante situaciones de daño (género y grupos de edad de los menores)
Género | Edad | Total | |||
Niño | Niña | 9-12 | 13-17 | ||
No | 17 | 17 | 18 | 16 | 17 |
Bastante o totalmente | 83 | 83 | 82 | 84 | 83 |
Fuente: EU Kids Online 2019: P24.
Respecto a la percepción que tienen los progenitores de la capacidad de sus hijos o hijas para enfrentarse a situaciones de daño, las respuestas (tabla 4) son bastante variadas: el 44% de los progenitores percibe que sus hijos e hijas tienen la capacidad de enfrentarse “bastante o totalmente” a situaciones de daño. El 31% considera que sus hijos e hijas no tienen “mucha capacidad” y el 25% restante piensa que sus hijos no son capaces de enfrentarse a situaciones de riesgo online “para nada”.
Tabla 4. Percepción de la capacidad de sus hijos o hijas para enfrentarse a situaciones de daño (género y grupos de edad de los menores)
Género | Edad | Total | |||
Niño | Niña | 9-12 | 13-17 | ||
Para nada | 23 | 28 | 41 | 9 | 25 |
No mucho | 32 | 30 | 37 | 25 | 31 |
Bastante o totalmente | 45 | 42 | 22 | 66 | 44 |
Fuente: EU Kids Online 2019: P25.
Esta percepción respecto a la capacidad de sus hijos e hijas está fuertemente relacionada con la edad del menor, y alineada con una lógica según la cual, a más edad de los menores, más actividades y más habilidades y competencias digitales, sin embargo, las diferencias atendiendo al género de los menores son pequeñas.
Algunas conclusiones y discusión
El acoso sufrido por lo menores ha crecido en la última década de una forma muy destacable pasando del 15% en 2010 al 33% en 2018. Además, el daño causado es igualmente notable, ya que tres de cada cuatro menores que han sufrido episodios de cyberbullying declaran haberse sentido (muy, bastante o un poco) molestos como consecuencia de ello.
La mayoría de las víctimas del acoso y del ciberacoso no avisan ni alertan a los adultos, progenitores o profesores. En nuestra encuesta de EU Kids Online Spain de 2018, el 70% de los menores españoles respondía que en caso de experiencias negativas hablaba con un amigo, el 46% con su padre o su madre, y tan solo un 11% con su profesor o profesora (Garmendia et al., 2019).
En las familias en muchas ocasiones prevalece el silencio de los menores, no cuentan el acoso, porque piensan que sus progenitores les van a privar del acceso a internet, o porque si lo denuncian los acosadores se van a implicar con más saña o, simplemente, porque creen que no va servir de nada. Cross et al. en su investigación de 2009 afirmaron que en el 46 % de los estudiantes acosados cibernéticamente que se lo dijeron a un adulto su situación empeoró o no mejoró después de decirlo. En todo caso, en las escuelas, los consejeros escolares deben tomar la iniciativa con un enfoque que incluye cinco áreas: facilitar el desarrollo de políticas escolares efectivas; educar a los progenitores; educar a los estudiantes; desarrollar programas de ayuda entre iguales; y proporcionar otros servicios como informes y oportunidades de asesoramiento
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
Casado, M.A.; Garmendia, M. & Garitaonandia, C. (2019). Internet y la infancia española con problemas de aprendizaje, de comportamiento y otras discapacidades. Revista Latina de Comunicación Social, 74, 653-667. http://dx.doi.org/10.4185/RLCS-2019-1350
Garitaonandia, C., Karrera, I., Larrañaga, N. (2019). La convergencia mediática, los riesgos y el daño online que encuentran los menores. DOXA COMUNICACIÓN. Número: 28, p.: 01-22. https://doi.org/10.31921/doxacom.n28a10
Garitaonandia, C., Karrera, I., Jiménez, E. y Larrañaga, N. (2020). Menores conectados y riesgos online: contenidos inadecuados, uso inapropiado de la información y uso excesivo de internet. EL PROFESIONAL DE LA INFORMACIÓN. Vol: 29, Número: 4, Páginas: 1-10. https://doi.org/10.3916/C65-2020-06
Garmendia Larrañaga, M., Jiménez Iglesias., E. y Larrañaga Aizpuru, N. (2019). Bullying y ciberbullying: victimización, acoso y daño. Necesidad de intervenir en el entorno escolar | Bullying and cyberbullying: victimisation, harassment, and harm. The need to intervene in the educational centre. Revista Española de Pedagogía, 77 (273), 295-312. doi: https://doi.org/10.22550/REP77-2-2019-08
Garmendia, M.; Martínez, G.; Larrañaga, N.; Jiménez, E.; Karrera, I., Casado, M, A. y Garitaoanandia, C. (2020). Las madres y los padres en la convergencia mediática: competrencias, mediación, oportunidades y riesgos online. Universidad del País Vasco (UPV/EHU). Bilbao. https://addi.ehu.es/handle/10810/49633
Livingstone, S., Haddon, L., Görzig, A., y Ólafsson, K. (2011). Risks and safety on the internet: The perspective of European children. Full findings. LSE, EU Kids Online.
Udris, R. (2015). Cyberbullying in Japan: an exploratory study. International Journal of Cyber Society and Education. Pages 59-80, Vol. 8, No. 2. doi: 10.7903/ijcse.1382